El sector de la construcción es el responsable del 39% de las emisiones de dióxido de carbono, del 40% de la contaminación del agua, y de emplear más de 400 millones de toneladas de materiales al año, muchos de ellos con impactos adversos para el planeta. Por esta razón, en la actualidad, la sostenibilidad cada vez está tomando un papel más protagónico en la industria.
De acuerdo con Asobancaria, los avances más destacables en materia de sostenibilidad para el país llegaron después del año 2008, cuando fue creado el Consejo Colombiano de Construcción Sostenible (CCCS), una organización sin ánimo de lucro, cuyo compromiso es elevar el nivel de sostenibilidad de todas las edificaciones nuevas y existentes.
De ahí en adelante, el país comenzó a reconocer la importancia de que los proyectos de construcción de vivienda pudieran certificar que incorporaban elementos de sostenibilidad, con la implementación de tres tipos de certificaciones: Edge, Leed y Casa Colombia; siendo la primera la más demandada en el país.
Los avances
Según la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), tras cinco años desde la llegada de la certificación Edge se han certificado más de 9 millones de metros cuadrados para edificaciones en los segmentos de comercio, industria, hospitales, hoteles y vivienda.
Y en materia de vivienda, se han certificado 130.000 unidades habitacionales, de las cuales 95.000 son Viviendas de Interés Social (VIS), es decir, el 73% de estas.
“El sector constructor está contribuyendo cada vez más con la mitigación al cambio climático. Estos resultados evidencian una contribución del sector, a través de lineamientos de construcción sostenible que generan ahorros de agua y energía en las edificaciones, pero, sobre todo, que generan capacidades empresariales para esta transformación hacia la sostenibilidad como centro de los negocios”, afirmó Sandra Forero, presidente de Camacol.
Edificios más ahorradores
Las edificaciones verdes generan, según el gremio constructor, eficiencias como un ahorro anual en energía de 217,507 megavatios hora (MWh); 7,3 millones de metros cúbicos de agua y 88.487 toneladas totales de dióxido de carbono (CO2).
“Durante los últimos cuatro años, los proyectos certificados con Edge en el país han generado importantes ahorros. Muestra de ello son los 109,597 MWh/año ahorrados, lo que equivale a la energía consumida por más de 10.700 hogares en un año; los 3,6 millones m3/año de agua que dejaron de consumirse y con los que podrían llenarse 1.440 piscinas olímpicas; o los 51,587 tCO₂/año de emisiones que no se emitieron a la atmósfera y que equivalen a retirar a más de 11.200 carros del tránsito cada año”, explicó Forero.
Incentivos tributarios
El sistema financiero ha sido un actor importante en el propósito de impulsar los programas de construcción sostenible en el país. De hecho, en América Latina, Colombia es el país con mayor número de instituciones financieras que ofrecen financiación preferencial para proyectos sostenibles.
De acuerdo con Asobancaria, uno de los esfuerzos más destacables es la emisión de bonos verdes y bonos clima, dos productos financieros diseñados para conseguir recursos que ayuden a fondear proyectos con ahorros en energía y agua en industrias como transporte, desechos, agricultura, industria y construcción, lo que incluye vivienda.
“Esta iniciativa inició en 2016 con Bancolombia, que realizó emisión de bonos verdes por $350.000 millones, a lo que se sumaron luego operaciones de Davivienda, Bancoldex, Banco de Bogotá y Celsia, entre otros. Gracias a estos esfuerzos, Colombia totaliza una emisión de más de US$500 millones para esta materia y ocupa el quinto puesto en Suramérica en la emisión de estos títulos”, apuntó el gremio financiero.
Por otra parte, el Ministerio de Vivienda lanzó el año pasado Ecobertura, programa que tuvo una inversión inicial de $250.000 millones y que tiene como fin beneficiar los interesados en adquirir vivienda No VIS que cumpla con estándares de sostenibilidad y sea amigable con el medioambiente.
Así, los hogares que adquieran vivienda nueva e incorporen requisitos de sostenibilidad, podrán ser beneficiarios de una cobertura de 52 salarios mínimos mensuales legales vigentes (SMMLV), el cubrirá el pago de intereses corrientes del préstamo durante siete años.
Según la cartera, con corte al 15 de septiembre de este año se han otorgado 19.100 subsidios No VIS, incluyendo los de Ecobertura.
Así las cosas, dada la tendencia hacia el desarrollo de las construcciones sostenible, la recomendación desde Asobancaria es robustecer estas iniciativas desde la política pública con la generación de incentivos a la oferta, como beneficios tributarios, o a la demanda, vía subsidios.